Aprenda por qué el oro y Bitcoin (BTC) son dos activos complementarios que pueden ayudar a crear ahorros sólidos para garantizar la resiliencia en tiempos de incertidumbre. También veremos cómo comprar oro de forma segura con GOLD AVENUE, plataforma líder en venta, almacenamiento y canje de metales preciosos
¿Cuál es la diferencia entre el oro y el Bitcoin?
Si Bitcoin (BTC) goza a veces del sobrenombre de «oro digital», no es por casualidad. De hecho, Bitcoin y el oro, aunque opuestos en muchos aspectos, son lo que se conoce como depósitos de valor.
Bitcoin es un activo digital del que somos los únicos propietarios, siempre que, por supuesto, conservemos la propiedad de sus claves privadas. El oro, en cambio, es un activo físico, palpable e intercambiable, y siempre lo ha sido. Además, el oro fue durante mucho tiempo un valor de referencia para la moneda en circulación, y se denominó «patrón oro», una estructura que se fue abandonando gradualmente a principios de los años 30 en Europa y en 1976 en Estados Unidos, lo que provocó una subida del precio del oro.
Y aunque el oro ya no se utiliza directamente en los sistemas monetarios mundiales, el metal precioso sigue interesando a los particulares que desean disponer de ahorros físicos impermeables a los diversos acontecimientos del sistema financiero mundial, tanto geopolíticos como inflacionistas, que siguen preocupando a los hogares.
Entonces, ¿por qué Bitcoin goza del sobrenombre de oro digital? Para entenderlo, es necesario evaluar qué tienen en común Bitcoin y el oro. En primer lugar, la principal razón del interés es la limitada cantidad de oro disponible. Cada año se extraen pequeñas cantidades de oro, y la cantidad de bitcoins que se ponen en circulación se reduce a la mitad cada 4 años debido a la reducción a la mitad. Además, según el libro blanco escrito por Satoshi Nakamoto, nunca habrá más de 21 millones de unidades de Bitcoin disponibles en el mercado.
También podemos establecer un interesante paralelismo entre estos dos activos y su relación con el dinero fiduciario que utilizamos en nuestra vida cotidiana. Dado que tanto el oro como el Bitcoin pueden utilizarse como medio de cambio (el Bitcoin puede utilizarse como medio de pago en muchos países), como unidades de cuenta o como depósito de valor, son similares a una moneda.
Sin embargo, la principal diferencia entre el Bitcoin y el oro es probablemente su propia volatilidad. De hecho, el Bitcoin, aunque se revaloriza a largo plazo, es extremadamente volátil a corto y medio plazo. Además, tiene una correlación significativa con el sistema financiero tradicional y sigue siendo sensible al impulso de los inversores y a los movimientos del mercado de criptomonedas.
Figura 1 – Volatilidad media diaria observada para el oro, Bitcoin, el índice Nasdaq y el índice S&P 500
Por ejemplo, el 19 de mayo de 2021, BTC sufrió una pérdida del 30% tras un anuncio negativo sobre el mercado chino.
El oro, en cambio, se considera un activo relativamente estable, con una de las volatilidades más bajas de los activos tradicionales y una tendencia a apreciarse a largo plazo. Además, se dice que el oro está inversamente correlacionado con otros activos, es decir, que cuando otros activos caen, el oro tiende a subir, y viceversa. Es esta baja volatilidad y correlación negativa lo que confiere al oro su condición de valor refugio.
Finalmente, un último punto interesante es la fiscalidad específica del oro de inversión. En Francia, como en la mayoría de los países europeos, aunque el oro no está sujeto al IVA, sí se aplican impuestos a la reventa. Afortunadamente, el impuesto sobre las plusvalías obtenidas con el oro es decreciente en el tiempo, lo que significa que después de 22 años de propiedad, su oro estará exento de impuestos en el momento de la reventa.
Por qué el oro y el Bitcoin se complementan
Como acabamos de ver, las principales diferencias entre el oro y el Bitcoin son su volatilidad y su comportamiento ante los movimientos del mercado.
Pero, ¿deben los inversores elegir entre los dos? No, incluso podríamos decir que el oro y el Bitcoin son complementarios por las razones que acabamos de enumerar.
Poseer tanto oro como Bitcoin le permite consolidar sus ahorros diversificando su exposición a dos activos con propiedades similares. Así pues, poseer oro permite responder al problema de asegurar sus ahorros e inversiones, en la medida en que su valor es históricamente estable a largo plazo, y tiende a seguir siéndolo. Y como el precio del oro tiende a subir cuando otros activos importantes caen, también se utiliza para proteger la cartera de uno de los caprichos de los mercados de criptomonedas y acciones.
Por otra parte, el bitcoin se considera un activo especulativo que puede utilizarse para generar beneficios a corto y medio plazo (la volatilidad suele ser elevada), o incluso a largo plazo para los más pacientes, en cuyo caso la volatilidad puede «suavizarse» mediante estrategias de inversión como el Dollar Cost Averaging (DCA).
Sin embargo, con esta estrategia, usted no podrá utilizar Bitcoin como un activo que se puede utilizar en cualquier momento como un ahorro de respaldo, ya que dependerá de su precio actual.
Figura 2 – Volatilidad de Bitcoin (en azul claro) frente a distintos metales, incluido el oro (en azul marino)
Como sabemos, los buenos ahorros se diversifican, por lo que poseer activos con diferentes propiedades tiene sentido. Si una cartera se compone únicamente de inversiones del mismo tipo (bonos, acciones, ahorros, etc.), todo el valor de la cartera caerá simultáneamente cuando se produzcan factores desfavorables.
En este caso, al invertir tanto en oro como en Bitcoin, permite que su cartera reaccione ante un mayor número de situaciones que provoquen la caída de uno de los activos. Un descenso, que en este caso puede compensarse con la subida o la estabilidad relativa de otro activo.
En última instancia, invertir en oro es una buena manera de protegerse de la alta volatilidad del Bitcoin, especialmente con un activo físico que ha demostrado su valía a lo largo de los tiempos, especialmente durante periodos de aumento de la inflación.
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Otro punto interesante es que los lingotes de oro que compra en GOLD AVENUE son totalmente nuevos y asignados, lo que significa que son 100% suyos (a diferencia de otras plataformas que pueden vender oro usado o compartido). Si elige su solución de almacenamiento seguro, sus lingotes se guardarán en sus cámaras acorazadas de Suiza y fuera de su balance. En otras palabras, aunque le ocurra algo a GOLD AVENUE, sus metales seguirán perteneciéndole y podrá recuperarlos en cualquier momento.
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Figura 3 – Vista general de una ventana de compra de oro en el sitio web de GOLD AVENUE
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