El presidente de la República Centroafricana, Faustin-Archange Touadéra, quiere convertir a su país en un mercado global de Bitcoin (BTC) a través del proyecto Sango. La iniciativa pretende dar facilidades administrativas a los proyectos de blockchain en el país, así como la construcción de una «cripto isla».
La República Centroafricana quiere crear un centro para Bitcoin
Un mes después de la adopción del Bitcoin (BTC) como moneda de curso legal, Faustin-Archange Touadéra, presidente de la República Centroafricana, desvela un ambicioso primer proyecto de criptografía. El proyecto se llama Sango y pretende crear un centro de inversión global para la industria del blockchain:
Tras la aprobación unánime por parte de la Asamblea Nacional del estatus de moneda de curso legal del BTC, ¡nos complace mostrar la primera iniciativa concreta! Va más allá de la política y la administración y tiene el potencial de remodelar el sistema financiero de CAR bitcoinhttps://t.co/1oxLHOen6q
– Faustin-Archange Touadéra (@FA_Touadera) 24 de mayo de 2022
Sango es una referencia a la segunda lengua oficial del país junto al francés.
Esta iniciativa tiene varias facetas, la primera de las cuales es la creación de un mercado dedicado a la cadena de bloques. También existe la visión de una «isla criptográfica» y el desarrollo de una cartera digital. Esta isla dedicada a las criptomonedas también recuerda a otro proyecto: la isla de Satoshi.
La documentación descriptiva presume de una disminución de los límites entre lo virtual y lo real con una representación de los bienes inmuebles de la isla en el metaverso. Todo estará tokenizado y esto incluye los títulos de propiedad física.
También se promete a los criptoinversores el acceso a los recursos naturales del país, como el oro, los diamantes y el uranio.
Desafíos para llevar a cabo este proyecto
Faustin-Archange Touadéra considera que el reconocimiento de Bitcoin por parte de la República Centroafricana es el comienzo de una transformación mucho más profunda de la economía del Estado, en contraposición al modelo actual:
A pesar de ello, dada la inestabilidad política así como la situación económica de la República Centroafricana, la consecución de estos objetivos parece difícil. Por supuesto, será necesario convencer a los inversores para que desplieguen las infraestructuras necesarias allí y hacer frente a la presión internacional, como es el caso de El Salvador.
En la actualidad, el documento de presentación del proyecto Sango parece más un folleto de ventas con argumentos contundentes para el público en general que un libro blanco detallado. Si esta visión se hace realidad, podría ser un impulso económico para el país y un vehículo de crecimiento.
