El chatbot GPT-3 de OpenAI goza últimamente de cierta popularidad, ya que se dice que puede sustituir a los humanos en muchas operaciones, como escribir o codificar. Vitalik Buterin, fundador de Ethereum (ETH), se prestó por tanto al experimento para dar respuesta a un problema al que se enfrentaba.
Vitalik Buterin prueba el chatbot GPT-3 de OpenAI
Últimamente, el chatbot GPT-3 de OpenAI ha incendiado las redes sociales. Esta inteligencia artificial sería una auténtica navaja suiza, a la que podríamos pedir que escribiera entradas de blog sobre cualquier tema, o incluso que codificara en lugar de los desarrolladores o corrigiera errores en un contrato inteligente :
omg. seriamente alucinante
nos vamos a quedar todos sin trabajo pic.twitter.com/iwjjOTPDLY
– devtooligan (@devtooligan) 1 de diciembre de 2022
Ante los méritos que se le atribuyen, Vitalik Buterin quiso experimentar con un caso práctico concreto.
En la página web que presenta su Ethereum Name Service (ENS) «vitalik.eth», la información disponible permite a los visitantes ir a una versión de su blog alojada con la tecnología InterPlanetary File System (IPFS):
Figura 1 – Vista del ENS vitalik.eth
El problema es que esta dirección es en realidad un hash criptográfico. Como la secuencia alfanumérica resultante depende de los datos que se representen, esta dirección cambia cada vez que el fundador de Ethereum (ETH) actualiza su blog.
Así, Vitalik Buterin tiene que actualizar periódicamente su página ENS con la nueva dirección, lo que considera una tarea repetitiva para la que quería desarrollar un programa automatizado.
Desarrollar un programa automatizado
Todo el proceso se realiza en varios pasos: Vitalik Buterin escribe sus entradas de blog en GitHub, entonces un programa tiene que subirlo automáticamente a IPFS y actualizar la página ENS vitalik.eth:
Figura 2 – Vista previa de un artículo de Vitalik Buterin en GitHub
Explica que el primer paso lo gestiona una herramienta informática llamada Fleek, pero que prefiere seguir siendo «autosuficiente» a la hora de actualizar su ENS, ya que esto implica transacciones en la blockchain de Ethereum. Así que le pide al chatbot GPT-3 de OpenAI que escriba el código para el script que necesita:
Figura 3 – Vitalik Buterin dando instrucciones al GPT-3 de OpenAI
Como el resto del experimento es muy técnico, vamos a resumirlo. En primer lugar, el código se escribió en Python y no en JavaScript. Además, Vitalik Buterin quería que el código fuera independiente de cualquier biblioteca externa, como es el caso. Esto demuestra que, en primer lugar, hay que dar instrucciones muy precisas al chatbot.
A lo largo de las instrucciones adicionales que el fundador de Ethereum da al chatbot, se da cuenta de errores en el código. Entre ellas, el uso de ciertas funciones que no tienen cabida en este escenario, y que deberían ser sustituidas por otras.
A medida que avanza el experimento, Vitalik Buterin opta por codificar él mismo parte del guión, al considerar que es más eficiente que el chatbot. En una segunda parte, el chatbot le será útil, aunque tendrá que ser asistido. Su conclusión es, por tanto, bastante reveladora:
» El chatbot GPT-3 era útil como ayuda para programar, pero también cometía muchos errores. Al final, pude superar sus errores rápidamente, ya que tenía muchos conocimientos en la materia. «
Así pues, la GPT-3 de OpenAI puede suponer un verdadero ahorro de tiempo en algunas operaciones sencillas, pero no convertirá a nadie en un auténtico experto. Su uso requiere un conocimiento profundo del campo para el que se utiliza, ya que de lo contrario acabará teniendo una serie de imprecisiones o incluso errores.
