Un estudio reciente de CoinShares revela que los productos institucionales de inversión en criptodivisas han registrado volúmenes históricamente bajos, con sólo 1.000 millones de dólares en la última semana. Esto supone un 55% por debajo de la media anual, y el segundo peor rendimiento del año.
Bitcoin está perdiendo el interés institucional
A finales de agosto, los inversores institucionales mostraron un especial desinterés por los activos digitales. Al menos eso es lo que informa una reciente encuesta de CoinShares. Los productos de inversión en criptomonedas experimentaron su tercera semana consecutiva en rojo, es decir, con salidas que superan las entradas.
Para que conste, los productos de inversión incluyen los ETF, los ETP y todos los demás fondos especializados que ofrecen exposición a diversos activos. Son emitidos por Grayscale, ProShares, 21Shares o CoinShares.
En total, esta semana salieron 8,7 millones de dólares de los distintos productos de inversión en activos digitales mencionados anteriormente. Por otro lado, el Bitcoin (BTC) parece ser el gran perdedor. Los fondos que ofrecen exposición a la criptodivisa líder del mercado vieron escapar 15,3 millones de dólares en el espacio de 7 días.
Fig. 1: Tabla de volúmenes de fondos por activos
Por otro lado, Ether (ETH) lo está haciendo relativamente mejor. Los fondos que ofrecen exposición al activo han registrado pequeñas entradas semanales de 2,9 millones de dólares en total. En vísperas del mayor evento de su historia, Ethereum sigue atrayendo los focos.
Sin embargo, el panorama general sigue siendo sombrío. Todos estos productos institucionales sólo sumaron un pequeño billón de dólares en volumen de transacciones durante la semana. Esto supone un 55% menos que la media anual y marca el segundo peor resultado de 2022.
Demasiada correlación con los mercados de renta variable
Este estudio nos dice que la mayor parte del sentimiento institucional negativo hacia las criptodivisas se centra en el Bitcoin. De hecho, su precio ha caído bruscamente en los últimos días tras no superar la resistencia de los 25.000 dólares y actualmente ronda los 21.000 dólares.
Esta elevada volatilidad puede explicarse por la creciente correlación entre los mercados financieros tradicionales y el mercado de criptomonedas. Este es el caso, en particular, de Asia, situación que obligó al Fondo Monetario Internacional (FMI) a dar la voz de alarma el domingo.
Sin embargo, las recientes caídas de los mercados de acciones y criptomonedas no hacen más que revelar la ansiedad de la mayoría de los inversores. De hecho, el discurso de Jerome Powell el 25 de agosto, presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos (FED), es claramente temido.
Se espera que el banco central estadounidense anuncie, a través de su presidente, la continuación de su política restrictiva y una subida de los tipos de interés. Esto significaría una ralentización aún mayor del flujo de capital en los mercados financieros y, en última instancia, una prolongación del mercado bajista.
