En la mente de una gran mayoría, el término «NFT» rima con consumo excesivo de energía. Para Artrade (ATR), es esencial cambiar esta visión. Descubra cómo la aplicación trabaja por la neutralidad del carbono, a la vez que fomenta la redistribución de fondos a la caridad.
Artrade, la red social de fichas no fungibles (NFT)
Lanzado en marzo de 2021, en un momento en el que el sector de los tokens no fungibles (NFTs) era el principal atractivo del mercado de criptodivisas, Artrade (ATR) es una aplicación web y móvil para ver, referenciar, curar, comprar y crear NFTs.
Inspirado en la experiencia de usuario de las redes sociales más populares, como Instagram, Twitter o Pinterest, Artrade «se ha diseñado para satisfacer las necesidades del mayor número de personas, de la forma más sencilla posible». La startup francesa tiene la ambición de democratizar el mercado de las NFT y quiere convertir su aplicación en una referencia para los novatos.
Por supuesto, Artrade tiene las características clásicas de una red social, es decir, el feed de noticias, la pestaña de búsqueda, la posibilidad de seguir a los artistas que nos interesan o de compartir y comunicarse con otros usuarios. Sin embargo, el verdadero valor añadido de la aplicación reside en otra parte:
- NFT Live: la opción más esperada, permite crear una NFT «en vivo», directamente desde un teléfono o dispositivo móvil. Además, se puede personalizar al instante con una serie de filtros, emojis, texto o incluso GIFs;
- NFT Real: Esta función permite a cualquier persona publicar una NFT en venta que esté asociada a un activo real y físico. En otras palabras, si quieres vender cualquier artículo, Artrade te permite tokenizarlo y listarlo en su plataforma como NFT;
- Galería virtual: una de las opciones de Artrade es una sección de su aplicación dedicada íntegramente a la visualización de NFT a la manera de Tumblr o Pinterest. De hecho, este espacio es específico para cada usuario y toma la forma de una galería virtual.
El deseo de situar la ecología en el centro del mercado de las NFT
Durante el año 2021, las fichas no fungibles han dado que hablar. Un ejemplo de ello fue la venta récord de la NFT de Beeple por la friolera de 69 millones de dólares.
Hoy, aunque la palabra «NFT» está en boca de todos, su funcionamiento y utilidad siguen siendo oscuros para el público en general. En su mayor parte, no son más que grupos de píxeles que son comprados a precios exorbitantes por inversores ricos que no saben qué hacer con su dinero.
Dicho esto, hay una cosa en la que la mayoría de la gente, experta o no, está de acuerdo: los NFTs están terriblemente hambrientos de poder. Sin embargo, aunque esta crítica es válida en el actual estado de congestión de la red Ethereum (ETH), no es válida para todas las blockchains.
Impulsado por un equipo preocupado por las cuestiones ecológicas y medioambientales, Artrade quería diseñar el producto informático que «menos energía consumiera». En este sentido, la elección recayó en la cadena de bloques Solana (SOL). Basado en un consenso híbrido Proof-of-Stake y Proof-of-History, es mucho más eficiente que Ethereum en términos de costes, velocidad y consumo de energía.
De hecho, esta blockchain promete teóricamente una media de 65.000 transacciones por segundo, es decir, 4000 veces más que su competidor. Además, el coste por transacción es de unas fracciones de dólar y la velocidad de ejecución de las transacciones es de unos 0,4 segundos. De este modo, todas las transacciones – acuñar, vender, comprar o transferir NFT – en Artrade tendrán un coste energético muy bajo.
Aunque el consumo de energía es muy bajo, Artrade no quiere quedarse ahí. El objetivo final es lograr la neutralidad total. Para ello, el consumo restante se compensará con la financiación de organizaciones sin ánimo de lucro que trabajen por la protección del clima y el medio ambiente. ClimatePartner certificará que el balance es neutral.
Los valores de Artrade: el éxito a través de la responsabilidad
Al elaborar su plan económico, Artrade se inspiró en gran medida en el concepto de Sanpo Yoshi, según el cual un negocio debe beneficiar a todos, no sólo al vendedor y al comprador.
Entre los siglos XVII y XIX en Japón, Omi Shonin fue la comunidad mercantil más exitosa. La clave de su éxito fue la base de su estrategia, la «Satisfacción Triple»: buena para el vendedor, buena para el comprador y, sobre todo, buena para la sociedad.
Los valores de Artrade: poner al comprador, al vendedor y a la sociedad en el centro de la economía
Con esta idea se construyó la plataforma Artrade: para dejar un impacto cero en la sociedad y en el medio ambiente que rodea al comprador y al vendedor. Por supuesto, esto incluye la ambición de la neutralidad total del carbono mencionada más adelante, pero no sólo. De hecho, Artrade también desea permitir a sus usuarios participar, cuando lo deseen, en la financiación de organizaciones benéficas.
En pocas palabras, los creadores de NFT, los coleccionistas de renombre y las futuras estrellas de la plataforma podrán optar por donar la totalidad o parte de sus beneficios a organizaciones benéficas.
A través de la herramienta Binance Charity Wallet, Artrade ha creado un fondo que recogerá las donaciones de los distintos usuarios de la plataforma. Después, gracias a la Binance Charity Foundation, el dinero recaudado se utilizará para financiar numerosos proyectos benéficos de forma totalmente transparente.
Para ilustrar este punto, imaginemos que un futbolista de renombre internacional hace una NFT Real de su camiseta autografiada a través de la aplicación Artrade. Podrá elegir distribuir un porcentaje de esta cantidad al fondo de caridad y beneficiar así a organizaciones como UNICEF o la Fundación Mundial para la Naturaleza (WWF).
