Sam Altman, CEO de OpenAI, quiere movilizar billones de dólares para establecerse en el campo de los semiconductores, esenciales para el desarrollo de la inteligencia artificial (IA) y, por tanto, del ChatGPT. Un proyecto que podría costar hasta 7.000 billones de dólares, superando con creces el tamaño actual de la industria de componentes electrónicos.
Sam Altman quiere varios billones de dólares para acelerar el desarrollo de la IA
The Wall Street Journal informa de que Sam Altman, consejero delegado de OpenAI, quiere recaudar varios billones de dólares para hacerse un hueco real y duradero en el mercado de los semiconductores, unos componentes electrónicos que escasean y que, sin embargo, son vitales para el desarrollo de modelos lingüísticos basados en la inteligencia artificial (IA).
Según una fuente entrevistada por el Wall Street Journal, las ambiciones de Sam Altman costarían del orden de 5 a 7 billones de dólares, mucho más que el tamaño actual de la industria mundial de semiconductores: ésta se situó en «sólo» 527.000 millones de dólares el año pasado, y las previsiones apuntan a que esta cifra ascenderá a 1 billón de dólares anuales en 2030.
Las cantidades comentadas por Altman también serían desproporcionadamente grandes para los estándares de recaudación de fondos corporativos, mayores que la deuda nacional de algunas de las principales economías del mundo y mayores que los gigantescos fondos soberanos.
Wall Street Journal
Ambiciones además reveladas en X por el propio CEO de OpenAI, que indicó que el mundo necesitaba «más infraestructura para la IA»:
creemos que el mundo necesita más infraestructura para la IA -capacidad de laboratorio, energía, centros de datos, etc.- de la que la gente planea construir actualmente.
Construir infraestructuras de Inteligencia Artificial a gran escala y una cadena de suministro resistente es crucial para la competitividad económica.
openai intentará ayudar
– Sam Altman (@sama) 7 de febrero de 2024
«Creemos que el mundo necesita más infraestructura para la IA -capacidad de fabricación, energía, centros de datos, etc.- de la que la gente proyecta actualmente. – de lo que la gente proyecta construir actualmente. Construir infraestructuras de IA a gran escala y una cadena de suministro resistente es crucial para la competitividad económica. OpenAI intentará ayudar».
Antes de que fuera -brevemente- expulsado de OpenAI, Sam Altman ya estaba, al parecer, tratando de recaudar miles de millones de dólares para construir su propia empresa de microchips, un proyecto que entonces se ejecutaba bajo el nombre en clave «Tigris». Para ello se habría puesto en contacto con inversores de Oriente Medio.
Un proyecto grande, a muy gran escala
Según el Wall Street Journal, Sam Altman ya se ha reunido con Gina Raimondo, la Secretaria de Comercio de EE.UU., para hablar de esta iniciativa, que requeriría una asociación a muy gran escala con patrocinadores financieros, socios industriales y también el Gobierno de EE.UU., para el que el mercado de semiconductores es crucial.
OpenAI ha mantenido conversaciones productivas sobre el aumento de la infraestructura global y las cadenas de suministro de chips, energía y centros de datos […]. Seguiremos informando al gobierno estadounidense dada la importancia para las prioridades nacionales, y esperamos compartir más detalles en una fecha posterior.»
Portavoz de OpenAI
Aunque el proyecto está aún en sus primeras fases, ya conocemos las líneas maestras: OpenAI crearía una asociación con varios inversores, fabricantes de electrónica y proveedores de energía, que juntos crearían nuevas infraestructuras dedicadas a la fabricación de componentes electrónicos.
Se dice que los Emiratos Árabes Unidos desempeñan un papel importante en el proyecto, y Sam Altman se reunió recientemente con el máximo responsable de seguridad del país, que es también hermano del actual Presidente Mohamed bin Zayed al Nahyan, para hablar de ello.
Sin embargo, las conversaciones sobre este proyecto único se encuentran aún en fase preliminar y es posible que nunca lleguen a buen puerto. En cualquier caso, ponen de relieve la imposibilidad de que el mercado actual de semiconductores responda a la ya fuerte demanda de modelos lingüísticos basados en IA, que además se espera que siga creciendo.
Por el momento, OpenAI está desarrollando sus diversos modelos de IA utilizando los recursos informáticos de Microsoft.
