Sam Bankman-Fried ha sido llamado a declarar ante el Comité de Servicios Financieros de la Cámara de Representantes de Estados Unidos el 13 de diciembre por su presidenta, Maxine Waters. Sin embargo, dice que «no está seguro» de que esto vaya a ser posible en esa fecha.
Sam Bankman-Fried testificará sobre FTX
El caso FTX continúa, y mientras los clientes buscan justicia, Sam Bankman-Fried (SBF) ha sido invitado a testificar ante el Comité de Servicios Financieros de la Cámara de Representantes de Estados Unidos por su presidenta, Maxine Waters. En términos sencillos, este organismo es una división del Congreso estadounidense que supervisa las actividades de la Reserva Federal (FED), el Departamento del Tesoro y la Comisión del Mercado de Valores (SEC).
Fue en Twitter el viernes pasado cuando Maxine Waters pidió la colaboración del SBF para una audiencia el 13 de diciembre:
«Apreciamos que hayan sido sinceros en sus discusiones sobre lo ocurrido en FTX. Su disposición a hablar en público ayudará a los clientes [y] a los inversores de la empresa […]. A tal fin, agradeceríamos su participación en nuestra audiencia del día 13. «
Sin embargo, la pseudofranquicia que se discute es relativa, dadas todas las verdades que han salido a la luz desde que FTX explotó en vuelo.
La respuesta lunar de Sam Bankman-Fried
Cuando el presidente de una alta autoridad del estado del que somos ciudadanos nos pide que testifiquemos, es costumbre aceptar esta invitación. Sin embargo, parece que SBF desconoce esta costumbre, por lo que se permitió una respuesta evasiva a Maxine Waters:
Rep. Waters, y el Comité de Servicios Financieros de la Cámara de Representantes:
Una vez que haya terminado de aprender y revisar lo sucedido, sentiría que es mi deber comparecer ante la comisión y dar explicaciones.
No estoy seguro de que eso ocurra antes del día 13. Pero cuando lo haga, testificaré. https://t.co/c0P8yKlyQt
– SBF (@SBF_FTX) 4 de diciembre de 2022
Sam Bankman-Fried dice que sentirá que es su deber presentarse y testificar, pero que primero debe terminar de «aprender y examinar lo sucedido». Por ello, «no está seguro de que eso vaya a ocurrir antes del día 13».
Por el momento, Maxine Waters no ha reaccionado, al menos no públicamente. Más allá del hecho de que los trámites relacionados con un asunto tan serio se estén llevando a cabo en Twitter, esta situación es sorprendente, dado lo duros que pueden ser los reguladores estadounidenses con menos. Los mismos reguladores a los que SBF mandaba a tomar por culo hace unas semanas.
