La digitalización de los recuerdos deportivos cambiará el coleccionismo en el futuro y reforzará la conexión entre el aficionado y el deportista, haciendo que la industria sea mejor para todos
No es ningún secreto que el mundo se está digitalizando. Desde la forma en que consumimos los medios de comunicación hasta la forma en que hacemos negocios, cada vez hay más aspectos de nuestras vidas que se mueven en línea. Y el sector del coleccionismo no es una excepción. Una nueva generación de compradores nativos de lo digital está llegando a la mayoría de edad y está sacudiendo el mercado tradicional de los objetos de colección, con deseos de un comercio de activos más intuitivo y fácil de usar.
Este cambio generacional está siendo impulsado por el aumento de los NFT (tokens no fungibles), que son activos digitales que se almacenan en la cadena de bloques, un libro de contabilidad descentralizado que permite la propiedad y la transferencia de activos a prueba de manipulaciones.
La generación Z liderará el camino
Las NFT están aumentando su popularidad entre las generaciones jóvenes y conocedoras de la tecnología. La generación Z y los millennials se sienten mucho más cómodos con los activos digitales que sus homólogos mayores. A medida que estas generaciones van adquiriendo autonomía financiera, buscan nuevas formas de invertir y amplían sus horizontes con respecto a los activos que poseen. Buscan productos innovadores que les proporcionen diversos tipos de utilidad y beneficios.
El mercado de artículos deportivos de colección es un ejemplo perfecto de un sector de inversión que está aumentando su valor y encaja con el caso de uso ideal para las NFT. El mercado se estimó recientemente en 5.400 millones de dólares y se espera que crezca a un ritmo del 9,7% CAGR entre 2022 y 2031. Las NFT ya están causando sensación en el mundo del deporte, con ventas importantes como las NFT respaldadas por activos de Michael Jordan y Lou Gehrig que se agotan en un mercado de NFT deportivas en su lanzamiento. Casi todos los meses, las empresas de NFT y criptomonedas están patrocinando equipos deportivos para que los aficionados conozcan mejor lo que ofrece el sector.
En lugar de navegar por las casas de subastas físicas o asistir a convenciones de tarjetas deportivas, los compradores más jóvenes están recurriendo a los mercados digitales para encontrar las últimas NFT deportivas. Desde las tarjetas de intercambio que viven en la cadena de bloques hasta las NFT respaldadas por activos físicos, el mercado ha comenzado a ofrecer numerosas formas para que las personas participen en la tendencia. Después de todo, la Generación Z pasa la mayor parte de sus horas de vigilia en línea, por lo que no es de extrañar que se sientan cómodos comprando activos que existen digitalmente.
No sólo son nativos digitales, la generación Z es nativa de la Web3: han nacido en un mundo con Internet, redes sociales y dispositivos móviles. Están acostumbrados a interactuar con contenidos digitales y han crecido con una ética de bricolaje. Se sienten naturalmente atraídos por el mundo de las NFT, donde pueden crear, poseer e intercambiar sus activos digitales favoritos al alcance de su mano.
Todo esto da forma a la impactante declaración de PwC:
«No nos sorprendería que en los próximos cinco años la venta de activos digitales se convirtiera en una de las mayores fuentes de ingresos para muchos equipos y ligas «
Mayor expresividad
Según destaca un artículo de Forbes, la Generación Z tiene «una alta propensión a ser más expresiva», un rasgo que se ha visto amplificado por el auge de las redes sociales. Para la Generación Z, la autoexpresión es clave, y siempre están buscando nuevas plataformas para compartir su creatividad. También quieren estar más cerca de sus intereses y aficiones, y la Web3 les permite participar en una gran cantidad de actividades centradas en la comunidad.
A diferencia del mundo tradicional de los objetos de colección, las NFT pueden utilizarse para compartir el acceso a experiencias únicas como conciertos virtuales, exposiciones de arte y eventos deportivos. Cada activo es único y tiene el potencial de crear experiencias mucho más ricas y expresivas, e incluso proporcionar beneficios en función del nivel de activo que posea el individuo.
