Para concienciar sobre las atrocidades cometidas contra los niños en Ucrania, 38 artistas han colaborado para crear un NFT interactivo llamado «Mariupol».
Como NFT interactivo, Mariupol es una obra de arte viva. Consta de 13 capas diferentes, cada una de las cuales tiene entre dos y cuatro estados únicos. El dueño de Mariupol puede elegir la apariencia final entre estos estados.

Mariupol NFT realizado por 38 artistas
Mariupol estará disponible para 14 coleccionistas; un NFT maestro y 13 NFT de capa. La puja estará abierta a todo el mundo, y los fondos recaudados se donarán a Voices of Children para proporcionar apoyo psicológico a los niños víctimas de la guerra
El NFT se expondrá en la Conferencia Non-Fungible, que tendrá lugar los días 4 y 5 de abril en Lisboa (Portugal). El evento acogerá numerosas charlas, paneles y talleres y expondrá obras de arte de más de 100 artistas. Mariupol se exhibirá en una pantalla gigante durante todo el evento en el escenario central.
Contribuidores e inspiración
Las obras de arte han sido creadas bajo la supervisión de The Guild, un colectivo independiente y descentralizado dirigido por artistas. Además de los miembros de The Guild, un grupo de artistas contribuyentes contaba con miembros del Museo de Cripto Arte y de la Conferencia No Fungible. Async Art también contribuyó a la creación de Mariupol con su dinámica tecnología NFT.
Los artistas participantes dijeron que una influencia importante fue el Guernica de Picasso, donde expresó los horrores del bombardeo de la ciudad de Guernica en 1937. Como reinterpretación moderna del Guernica, Mariupol también pretende encapsular la brutalidad de la guerra. Cada uno de los artistas que han contribuido a la exposición ha representado su interpretación de la guerra, con la esperanza de que sirva de recordatorio de que no debemos dejar que la historia se repita.
El fundador de Non-Fungible Conference, John Karp, comentó el propósito de Mariupol y dijo:
«Como todo el mundo en este continente, y en este mundo, estoy horrorizado por las imágenes que estamos recibiendo de Ucrania de civiles inocentes siendo bombardeados una vez más. El horror, la repugnancia y el dolor obligan a la gente a actuar».
Asimismo, explicó:
«Hace que los espectadores quieran hacer algo. Espero que esta obra de arte sea un testimonio del poder de la comunidad y la colaboración y una prueba de que, aunque todavía hay demasiado mal y sufrimiento en este mundo, queda mucho bien.»