El año pasado por estas fechas, el expresidente de los Estados Unidos Donald Trump lanzó su primera serie de cromos digitales en forma de NFT, lo que provocó tanto revuelo como burlas y generó millones de dólares en ventas. Tras una segunda ronda la pasada primavera, ha vuelto con la mayor serie de NFT hasta la fecha… pero el mercado no parece responder favorablemente.
Lanzada el martes, la colección Trump Digital Trading Cards: MugShot Edition incluye un total de 100.000 NFT coleccionables acuñados en Polygon, una red de escala Ethereum, y con un precio de 99 dólares cada uno. La primera colección contenía 45.000 NFT, mientras que la segunda tenía 47.000.
El marco de la colección hace referencia al hecho de que Trump fuera acusado de cargos por el Estado de Georgia en agosto, y que se le tomara una foto de ficha policial en Atlanta. Desde entonces ha utilizado la foto para vender productos y recaudar fondos para su campaña presidencial, y ahora forma parte del aspecto y la marca de sus últimos NFT. Pero eso no es todo.
Al igual que con las series anteriores, NFT INT LLC -que tiene la licencia del nombre y la imagen de Trump para la colección oficial- ofrece varias ventajas a los compradores que adquieran un gran número de cartas. Una de las ventajas es una tarjeta física que incluye un trozo del traje que llevaba en la foto, que según la empresa ha sido cortado en miles de pedacitos.
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– CollectTrumpCards (@CollectTrump) 12 de diciembre de 2023
Los coleccionistas que compren 47 de las tarjetas NFT en una sola transacción -4.653 dólares antes de comisiones- recibirán por correo una de las tarjetas físicas, que puede o no estar firmada por Trump. Y quien compre 100 tarjetas NFT a la vez (por valor de 9.900 dólares) y pague con criptomoneda recibirá dos tarjetas físicas, junto con entradas VIP para una cena de gala en su finca de Mar-a-Lago, en Florida.
En un vídeo promocional, Trump se autodenomina «su presidente favorito», destaca las diversas ventajas, reconoce que las ilustraciones caricaturescas exageran sus cualidades físicas y detalla el viaje de su traje desde la foto de la ficha policial hasta el objeto de colección destrozado.
«Era un gran traje, créeme, un traje realmente bueno. Está todo cortado, y te vas a llevar un trozo», dice Trump en el vídeo. Y concluye: «Ve ahora mismo y colecciona tu propia pieza exclusiva de la historia americana, y nos divertiremos todos juntos. Que tengas una buena vida».
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Las Trump Digital Trading Cards (NFTs) están pensadas como objetos de coleccionismo para disfrute individual exclusivamente, no con fines de inversión. pic.twitter.com/H6aqx6VSFd
– CollectTrumpCards (@CollectTrump) 12 de diciembre de 2023
Dado que las colecciones anteriores de NFT se agotaron en la venta primaria, tiene sentido que Trump quiera volver a este pozo, sobre todo con un potencial de casi 10 millones de dólares.
Sin embargo, ¿querrán sus fans comprarlas e invertir más en el proyecto? El segundo lote, lanzado en abril, tuvo un impacto inmediato en el valor del mercado secundario de las NFT originales, cuyo precio se desplomó más de un 50% en cuestión de horas y finalmente cayó a una fracción del precio de salida más alto de todos los tiempos, 1.079 dólares.
Ahora está volviendo a ocurrir. Según los datos de NFT Price Floor, la Trump NFT más barata de la serie original ha caído un 18% hoy a un precio actual de 396 dólares de Ethereum, recuperándose de un desplome del 33% a 319 dólares a primera hora de la tarde del martes. Por su parte, las cartas de la serie 2 han perdido un 34% de su valor y han caído hasta los 61 dólares, por debajo del precio original de 99 dólares.
Curiosamente, el sitio web Collect Trump Cards afirma que las últimas tarjetas NFT son intransferibles hasta el 31 de diciembre, dando a los creadores hasta el final del mes antes de que el mercado pueda decidir su valor. Veremos si se agotan antes de esa fecha. Hasta ahora se han acuñado unas 8.000, según datos del mercado OpenSea.
