Cuba está un paso más cerca de adoptar Bitcoin (BTC). De hecho, 7 meses después de legalizar los pagos con criptomonedas en su territorio, el Banco Central de Cuba emitirá ahora licencias para todos los proveedores de servicios de activos digitales. Una forma más de que Cuba se salte el embargo estadounidense vigente desde 1962.
Cuba emitirá licencias para criptomonedas
Siete meses después de dar la bienvenida a los pagos con criptodivisas en su territorio, Cuba comenzará a emitir licencias para Bitcoin (BTC) y otros activos digitales.
De hecho, según la Gaceta Oficial nº 43 de este martes, cualquier organización que califique como proveedor de servicios de activos digitales tendrá que solicitar ahora una licencia al Banco Central de Cuba para poder operar en el territorio.
El Banco Central de Cuba, al examinar la solicitud de licencia, evalúa la legalidad, oportunidad e interés socioeconómico de la iniciativa, las características del proyecto, la responsabilidad de los solicitantes y su experiencia en la actividad. […] El Banco Central de Cuba establece en la licencia, las características de los activos virtuales, las condiciones y restricciones de las operaciones autorizadas, así como las medidas a respetar para el control y custodia de los activos virtuales. «
Además, según el documento, cualquier organización que se niegue a cumplir estas nuevas directrices será objeto de sanciones de acuerdo con la legislación financiera del Estado insular.
Inicialmente, estas licencias tendrán una validez de un año y serán renovables por un segundo año, «dado el carácter experimental y novedoso de este tipo de actividad». Esta nueva normativa entrará en vigor el próximo 16 de mayo
Una forma de evitar el embargo estadounidense
Cuba está un paso más cerca de adoptar el Bitcoin como moneda de curso legal. De hecho, desde el 15 de septiembre de 2021, los cubanos pueden utilizar criptomonedas como medio de pago.
La isla de Cuba, que sigue sometida a un embargo estadounidense, tiene muy restringido el acceso a los servicios digitales. Por ejemplo, los cubanos no pueden obtener nombres de dominio de Internet ni comprar suscripciones a Spotify con tarjeta de crédito.
Prácticamente aislados del sistema financiero mundial, los cubanos tampoco pueden realizar compras por Internet, por lo que su única forma de sortear estas restricciones es a través de las criptomonedas. Como resultado, cada vez más locales tienen que acudir a servicios como el sitio «Bitrefill» para poder realizar compras que consideraríamos normales, pero a través de criptodivisas.
Empresas fintech como Wise, Stripe, Revolut o Venmo, por ejemplo, bloquean instantáneamente cualquier intento de un ciudadano o empresa cubana de utilizar sus servicios. Además, en noviembre de 2020, Western Union también interrumpió sus servicios en Cuba, penalizando gravemente los medios de transferencia de dinero de los cubanos.
A mayor escala, las empresas que operan en suelo cubano no pueden beneficiarse de los servicios de pago internacionales considerados democratizados, como PayPal, Mastercard o Visa.
Tal es el éxito de las criptomonedas frente a todos estos bloqueos que hoy es el Banco Central de Cuba el que ve en el Bitcoin una oportunidad para saltarse más ampliamente todas las restricciones establecidas por los americanos desde hace 60 años.
