En un contexto global bastante sombrío, la dificultad de minado de Bitcoin (BTC) alcanzó un nuevo récord durante el fin de semana. Te contamos por qué es notable
Récord histórico de dificultad de minado de Bitcoin (BTC)
Mientras los precios siguen bajando, hay un indicador relacionado con la red Bitcoin que sigue subiendo: la dificultad de la minería. Esto es lo que revelan los datos del sitio web BTC.com, que modela esta evolución.
En el mes de enero, la dificultad para generar un bloque en la red de Bitcoin ascendió a 26.640 millones, lo que supone un aumento del 9,32%. Un valor que supera el récord de mayo de 2021, antes de la prohibición de la minería de criptodivisas por parte de China.
Esta evolución también ha sido casi constante en los últimos meses:
Evolución de la dificultad de minería de la red Bitcoin (BTC) (Fuente: BTC.com)
De hecho, la dificultad de la minería sólo ha bajado una vez en noviembre del año pasado, cuando el precio de BTC cayó tras su máximo histórico.
¿Por qué aumenta la dificultad?
La dificultad aumenta porque el número de mineros aumenta, y con ellos la potencia de cálculo (llamada hashrate) que proporcionan a la red. Por lo tanto, la dificultad de la minería debe ajustarse constantemente hacia arriba o hacia abajo en función del hashrate. Sin esto, los bloques de la red Bitcoin se minarían demasiado rápido, o demasiado lento, lo que pondría en duda la estabilidad de la red. Todo ello permite a la red mantener un tiempo de producción en bloque regular. El hashrate medio es ahora de 188,63 EH/s.
En definitiva, el aumento de la dificultad de la minería es una buena noticia para el Bitcoin. De hecho, aunque esto no tenga ninguna repercusión (o muy indirecta) en su precio, cuanto más difícil sea la minería, más segura será la red. Y todo ello se debe a la mayor descentralización provocada por el creciente número de mineros. Y sabemos que la descentralización es uno de los argumentos más utilizados para justificar el interés de la mayor criptomoneda.
Este aumento de la dificultad también demuestra una cosa: a pesar de la consiguiente caída del precio de las criptoactivos, con el BTC alcanzando los 34.000 dólares esta mañana, la red de minería sigue siendo atractiva. Por lo tanto, esto es una prueba de la salud a largo plazo de la criptodivisa.
